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Emprendimiento, muy difundido, poco entendido ¿se necesita nueva visión?

Escrito por Sergio Ortiz Valdés PhD | 10/02/2021 11:02:11 PM

Los que nos hemos dedicado algún tiempo al tema de emprendimiento, nos hemos encontrado con básicamente las mismas historias; grandes empresas como ejemplos de emprendimientos: Facebook, Google, Airbnb, Uber, Netflix, LinkedIn, Amazon, Tesla, etc. Impresionantes ejemplos de empresa generalmente salidos de la región de la bahía de San Francisco conocida como Silicon Valley.

 

Estas llamadas startups que, apoyadas por Venture Capital, se convirtieron en unicornios que cambiaron la industria. Estos ejemplos se han usado en todo tipo de foros, cursos y programas de promoción del emprendimiento como si fuera el proceso común del emprendimiento, enviando un mensaje implícito de que la forma más valida (si no es que la única forma valida) de ser emprendedor es si el proyecto es fondeado por Venture Capital y crece exponencialmente.

 

En los cursos de emprendimiento es común que el alumno aprenda a hacer un “pitch” ante supuestos inversionistas, considerándose como competencia clave de cualquier persona que quiera ser emprendedora, pero ¿qué nos dice la realidad económica?

 

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De acuerdo a información de la Asociación Mexicana de Capital de Riesgo AMEXCAP y del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática INEGI, de las empresas que se crearon en México durante 2019, solo el 0.01% se financiaron con algún fondo de inversión, situación muy similar en Latinoamérica, los números en años anteriores, aunque parezca difícil de creer, son aún menos significativos. Bien podría decirse que en México y Latinoamérica está información no está actualizada y por lo tanto es poco confiable.

 

Veamos qué pasa en Estados Unidos; de acuerdo a información obtenida de la Oficina del Censo de los EU y al sitio especializado en información de negocios Statista, de las empresas que se crearon en 2019, solo el 0.17% recibieron inversión de algún Venture Capital, cálculos consistentes con diferentes estudios que se han hecho al respecto para diferentes años. ¿Qué nos dicen estos números? Que la gran mayoría, más del 99.98 % de las empresas que se crean no se financian con ningún tipo de Venture Capital, ni siquiera en EU, país en donde se inventó y se concentra la mayor parte de la industria del Venture Capital en el mundo. ¿No estaremos enseñando algo al menos inconsistente en los cursos de emprendimiento?

 

Por otro lado, de acuerdo a información de la OCDE, en los últimos 10 años, las empresas Pequeñas y Medianas han representado entre el 99.4% y 99.7% de las empresas en los países miembros de este organismo, además de ser el factor más importante para el empleo y para el crecimiento del PIB. En otras palabras, la mayoría de las empresas que se crean y sobreviven no crecen, pero al mismo tiempo tienen un mayor impacto en el PIB y en el empleo que las grandes empresas, por lo que el tener pequeñas empresas resulta entonces en un factor esencial para la salud del tejido empresarial de cualquier país. Es cierto, entre más innovación, más valor, sea el tamaño de empresa que sea, pero el crecimiento de nuevas empresas como patrón normal del proceso emprendedor es un mito, mito ampliamente difundido en los organismos y cursos universitarios de emprendimiento.

 

El crecimiento de una nueva empresa es la excepción, no la norma, al mismo tiempo, el financiamiento no es un factor crítico en el emprendimiento, lo que, si es un factor crítico, es la mentalidad emprendedora, el gran ausente en los cursos y programas de emprendimiento.

 

La capacidad emprendedora de una sociedad, representa su viabilidad, pero al mismo tiempo pareciera que la visión comúnmente aceptada del emprendimiento en universidades y organismos promotores del emprendimiento es más basada en un proceso de imitación fuera de contexto, de lo que se piensa sucede en el SV en vez de una visión enfocada al ser humano y en beneficio de la comunidad y medio ambiente. Aprovechemos el momento de crisis, de cambio, para tener una visión y un entendimiento más robusto, contextualizado, enfocado a la actitud emprendedora y menos basado en la imitación, esto ayudará a verdaderamente cambiar la realidad.

 

 

Te invitamos a conocer más sobre el Dr. Sergio Ortiz Valdés, autor del libro:

Formación emprendedora universitaria: más allá de los mitos. Emprendimiento con sentido de propósito.
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