La pandemia y el cambio climático son diferentes tipos de crisis que tienen semejanzas y que inciden una en la otra inevitablemente y esto es lo que debemos aprender de ello.
El cambio climático y la pandemia de Covid-19 son dos crisis diferentes, pero que tienen semejanzas que deben de generar conciencia en ciudadanos y gobiernos por igual. O al menos esa es la visión de Alicia Galindo, profesora del Tec de Monterrey quien nos planteó las lecciones que debemos aprender de estas crisis en el INCmty 2020, el festival de emprendimiento más grande de Latinoamérica.
Primero que nada, hay que entender que ambas crisis son consideradas choques exógenos que modifican abruptamente un sistema en su totalidad y que el efecto económico de ambas requieren implementar acciones agresivas para hacerles frente.
“Ambas crisis pueden considerarse un cisne negro y su peor escenario presenta elementos devastadores a nivel social y económico”, explica Galindo. Así es como una incide en la otra:
- Al año se calcula que mueren unos 9 millones de personas por la contaminación del aire.
- A su vez, la tasa de muerte de la Covid es 8% mayor en países con más contaminación.
- En China, hay un incremento de 15% a 22% de casos de Covid en ciudades con alta tasa de contaminación.
- En la pandemia de gripe española, hace 100 años, también se registraron 10% más de muertes en las ciudades más contaminadas.
- El cambio climático contribuye a la generación de enfermedades zoonóticas —como chikungunya, zika, dengue y la misma Covid.
Similitudes entre la pandemia y el cambio climático:
- Riesgos sistemáticos. El daño no es aislado, sino que afecta a todo el sistema.
- Multiplicador de riesgos: Ambas exacerban las vulnerabilidades de la sociedad.
- No lineales: El daño no es parejo, sino que se enfoca en las minorías.
- Efecto regresivo: Se va incrementando el daño.
- Colectividad: El daño es masivo.
Las lecciones que debemos aprender
- Por la relación entre ambas crisis, es necesario alcanzar la sustentabilidad. Para ello debe crecer el sector de energías renovables y la participación debe ser tanto de los gobiernos como de las empresas y los ciudadanos.
- Los cambios hacia la sustentabilidad también pueden incrementar la oferta de empleo en industrias específicas, pero hay que canalizarlo para que podamos aguantar las crisis. Esto debe crear resiliencia en los mercados.
- Se deben fortalecer las políticas públicas y los gobiernos deben tener un papel más participativo —por ejemplo, en la consecución del acuerdo de París.
- La educación es fundamental en niños y jóvenes para que entendamos que el cambio climático es una realidad y es un legado; y por eso debemos hacer algo.
La buena noticia, concluye Galindo es que la solución está en nuestras manos. ¿Te unes al cambio?